Felipe Gutiérrez de la Vega ha tratado siempre de elevar a la categoría de arte el cultivo y la selección de las cepas y la elaboración de sus cuidados y variados vinos, asociándolos o dedicándolos a figuras de la literatura, la música o el teatro como Sthendal, Camilo José Cela, Dashiell Hammett, Antonio Cortis y Charo López o a personajes como el Príncipe de Salinas de “El Gatopardo”.